Un poco de estimulación auditiva

lunes, 22 de junio de 2009

Romper

Mi vieja amiga, mi vieja camarada, mi vieja compañera, rompiste con los principios impuestos, rompiste con lo establecido, te atreviste a hacerlo, lo hiciste por valentía y por no dejarte arrastrar por el montón... Con una mentira... Olvidaste todo y lo rompiste, y te fuiste como si no hubiera pasado nada. Caminabas tranquilamente por la calle cuando te ví y de repente empezaste a volar, y si que lo hiciste, no se como pero de repente te salieron unas alas dragonezcas y volaste, volaste alto pero el gusto duro poco, debido a la fragilidad de tus alas, que se crearon bajo una base podrida, frágil, absorbida por terceros.

Caíste, te diste un golpe durísimo... Te llevé en brazos a mi hogar, en mi habitación despertaste, me abrazaste, lloramos juntos, tratamos por muchos medios tratar de olvidar el accidente aéreo y el accidente emocional e ideológico del que fuimos protagonistas, por eso olvidamos todo y tratamos de romperlo, ahora yo lo rompía, quería ser libre, como lo eres, quería volar como tú, solo que entre nosotros y algunas otras personas, podemos fortificar nuestras alas, para volar alto y volar a muchos horizontes, a muchos orientes, a muchos centros...

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