Life's what you make it

Dice el viejo tango de Gardel... 20 años no son nada... Absolutamente nada... Para un tipo como yo son muchos, y los que faltan... Pasé hoy la decena de años y desperté como si fuera un día normal, nada de mañanitas, nada de esto, nada del otro, parecía seguir mi vida tal y como era antes y después del día del onomástico... Genial, llegaron las felicitaciones de familia y amigos... Como soy un simple mocoso, pues ni se sentía cumplir 20 años, solo un paso más en la vida, recordando con nostalgia los maravillosos años de fantasía, de alegría pura, de dulces, naves espaciales, tecnologías que ahora parecen de risa... Un período de definición, de ajuste, como lo es la adolescencia y llego hasta ahora con 20 años a cuestas y todavía me acuerdo cuando tenía 5 años como si hubiera sido ayer, como si hubiera viajado en una máquina del tiempo... Solo Dios sabe que jodidos me depara el futuro... Puede ser brillante, desastroso, fatal o simplemente igual de simple y confortable que el presente... En fin pasaron unas cuantas horas volando por el limbo, una lavada psicológica y un viaje normal en automóvil familiar cuando llegué a comer al sombrero de las carnes y cualquier corte animal para degustar, si, asi se llama, nombre completo wey... Nos recibió un tipo apático, con cara de que no le habían dado su cocol... Rápidamente nos atendió un tipo fresco y chistoso que nos hizo el día, muy amable por cierto. La comida fue deliciosa, fue como volar en un filete new york por el cielo hecho de nubes de carne y unas cuantas papas al horno, o... y sopa de tortilla, mmm... Se les antoja ¿verdad? jajajaja... No creo, la estúpida onda vegetariana anda lavando cerebros por doquier... Si, desgraciadamente a los animales los tratan horrible en las nefastas granjas de engorda... Pero pues al fin y al cabo es lo que hay para comer, si no pareceríamos conejos comiendo pura hierba... Chale... Antes de recibir el plato medio mundo se enteró de que cumplía años y el tipo fresco y chistoso me colocó dos globos, jeje, estubo nice el detalle... En fin al llegar la hora del dulce y merecido postre, para relajar un poco la barriga, el tipo fresco y chistorín llegó con un pastel con velita y aunque no lo crean, una bonita y curiosa mini piñata... Fue un detalle bastante lindo, porque me hizo recordar mucho la gran niñéz que se tuvo... Mis padres y el tipo fresco me cantaron las mañanitas y le pegué a la mini piñata, casi se me salen las lágrimas, hacía 10 malditos años que no le pegaba a una piñata, y la verdad la nostalgia salió bastante, jeje... Despuecito de eso, llegó un señor con cachitos del otro lado y pues le compramos unos jeje, pa' ver que salía... La diosa fortuna no parecía estar de mi lado, porque pues yo quería dinero para autoregalarme algo (porque no me han dado el dinero que me prometieron por unos trabajillos) pero la muy méndiga solo me iluminó para ganarme un cachito gratis, que gran premio... Rasqué el premio y todo se fue por el caño, adios PlayStation 3 y camisa retro de Francia del mundial de Francia 98, puta madre... En fin, se pidió la cuenta, se le dio las gracias al tipo fresco, que de verdad iluminó junto con mis padres mi cumpleaños... Fue muy divertido... Aunque pues unos dirán que parece algo aburrido pero no... No me gusta festejar como si hubiera ganado la Copa del Mundo... Es simplemente un año más de vida, Dios ya sabe cuantos nos va a dejar cumplir, así que hay que festejar moderadamente... Por eso digo que fue un gran cumpleaños, mejor que el del año pasado... Regresamos en el vehículo tamaño familiar recordando lo ocurrido en el sombrero... Llegando al hogar le di a mi hermanita los globos y se divirtió como nunca con ellos, viendo en sus propios ojos los efectos del helio sobre el hule casi latex... 20 años amigos, y los que faltan... Solo se vive una vez, así que hay que disfrutarla, sea miserable, alegre, con melancolía, llorando cada semana, peleándose con el que se nos ponga enfrente, siendo tímidos, no casándonos, etcétera, etcétera, etcétera... Hay que disfrutarla...

Baby, life's what you make it
Celebrate it
Anticipate it
Yesterday's faded
Nothing can change it
(Párrafo de la canción Life's what you make it, de la banda ochentera inglesa Talk Talk, escrita por Mark Hollis, el vocalista)

Vapor...

Vapores místicos flotaban en el aire... Vapores tóxicos, vapores con olores potentes, que abrían y expandían el horizonte, aflojaban cualquier vergüenza, con esos vapores uno estaba dispuesto a todo, le daban 100 balazos y seguía peleando y teniendo una fuerza descomunal, vapores químicos nucleares que se encontraban debajo de la tierra, donde uno hasta podía ver el futuro, un futuro bastante incierto, incierto como lo es el destino, uno nunca sabe que demonios va a pasar hasta que ya es inevitable sacarle la vuelta al problema, pero un poco de vaporcito nos despeja, nos despreocupa, hasta irnos hundiendo más y más en un mundo irreal, un mundo que no existe, y al dejar de inhalar uno cae dolorosamente en la realidad y se da cuenta que está prácticamente con un pie en el frescobote porque le debe al fisco... Válgame... Y hasta en la cárcel se encuentra uno con el vaporcito mágico musical electrónico psicodélico que lo hace a uno volar y volar y volar, refugiarse en su propio mundo, en sus ideas, en sus reglas, que son las que valen más, al fin y al cabo los gobernantes también las rompen y se crean sus propias reglas, entonces para que chingados tenemos constitución si nadie la cumple, vayanse a la verga, por eso inhalo mi vaporcito y hago mis propias leyes, si yo me quiero coger a la vecina que está re buena me vale un soberano cacahuate que tenga a su monigote, me meto un poco de vapor y a darle que es mole de olla... Si yo quiero matar al perro de enfrente porque el hijo de la chingada no me deja dormir pos le doy su plomazo y se acabó, que chingue a su madre la PETA... Si me quiero casar con la escoba porque es la única que me pela, pos me caso con la escoba y pobre de aquel que diga que no... Me hecho otro poco de vaporcito para tranquilizarme, en realidad hice un bien, pero regresando, las cosas se pusieron peor que nunca amigos míos... Pero sin el vapor de qué está hecho uno... Uno no agarra valor para decir y hacer las cosas... Es una dependencia... Es un vicio... Es una necesidad...

Estos ojos

OJOS QUE NO VEN... CORAZÓN QUE NO SIENTE...

Ojos vidriosos, esos ojos que ven tristeza, o felicidad, o frustración, o coraje, o enojo, pero que siempre están al borde del llanto...

Ojos sin brillo, esos que están muertos, sin vida, inertes, gélidos, que solo tienen dos minutos antes de que ya dejen de ver para siempre...

Ojos radiantes, esos que siempre ven la suerte, un destino claro, un amor en su vida, prosperidad económica, salud, esos que siempre la vida les trae buenas cosas...

Ojos hundidos, esos que viven en la depresión, en las preocupaciones, en lo fatal...

Ojos amenazantes, miran los desafios, atemorizan con solo hacer un segundo de contacto con ellos, estos solo ven a los demás con inferioridad, casi casi si se le quiere hacer un contacto, se tiene que pedir permiso...

Ojos con bolsas, esos ojos que nunca descansan para obtener lo que quieren, o en casos fatales, los que no duermen por tanto pesar en su alma y en su vida...

Ojos tiernos, esos que solo tienen un lugar en la pupila para su otra pareja de ojos que los mira fijamente...

OJOS LECHOSOS, ESOS OJOS QUE DESGRACIADAMENTE NUNCA HAN PODIDO VER, PERO SIENTEN MUCHO MÁS QUE LOS DEMÁS...

Sombras nada más

Una sombra, una sombra y nada más, aparte de Dios y el "ángel de la guarda", es un ente que nunca te dejará solo, que te acompañará el resto de tu miserable o exitosa vida. Una sombra está presente desde el primer día, cuando eres niño te preguntas quien está ahí a un lado de tí, y resulta que es la sombra. Cuando uno crece se da cuenta que las sombras cobran vida, aquella compañera de sparring, aquella compañera de juegos, de escondidillas, evoluciona, toma forma humana, unos días no la ves por ningún lado, porque la tienes en forma humana, en forma de espía del FBI, se sabe esconder, apunta todos tus movimientos, se obsesiona por tí, te desee poseer, como uno la poselló y nunca la soltó. En ciertas ocaciones la sombra se transforma en una especie de ángel, se va de chaperón contigo, pero es por tu bien, no te quiere ver con malas compañías ni obrando mal ni nada de esas cosas. Siempre estará a tu lado. En la otra cara de la monedas se encuentra la sombra maligna, aquella que no te deja hacer nada y que busca cualquier cosa para tratar de hundirte, humillarte, quiere que pagues lo que según ella cree que le hiciste, de hecho, se pone en contacto con las sombras de tus amigos para obtener información hasta encontrar tu talón de Aquiles. Hacen hasta lo posible para destruirte, se te meten hasta en la cocina, ponen en tu contra a tu pareja, entre otras marrullerías. Por eso, en éstas épocas hay que sacar el lado paranoíco, porque uno ya no sabe en quien confiar...