Un poco de estimulación auditiva

jueves, 10 de febrero de 2011

Por las calles...

Por las calles rodaba uno... En un Rolls Royce 1968... Transportando a alguien que nunca supe quién demonios era y qué demonios hacía en su miserable vida, porque nunca se me permitió verle. Sólo me decía "Llévame a tal calle, tal número". Hasta eso que era una persona muy cortés, antes de decirme esas palabras me daba los buenos días y me ofrecía algo de comer por si no lo había hecho en mi humilde morada. En fin, iba yo por todos lados con ese ser humano atrás de mí, jadeando a veces, a veces callado, a veces platicando acerca de lo ocurrido el día anterior en el mundo que rueda y rueda. 

El motor del carro era tan potente que a veces no oía a mí patrón hablar. Llegábamos a nuestro destino y usualmente me quedaba esperándolo en el coche. Por las ventanas del coche podía ver las vanalidades y virtudes de este mundo, niños pidiendo limosna, un tipo mostrando la sonda para causar lástima y conseguir dinero para las medicinas, palomas siendo atropelladas, una balacera en un banco... una pareja besándose, otra pareja exhibiéndose, dándo rienda suelta a sus instintos carnales, como si fueran los únicos idiotas en el mundo, niños jugando futbol, una exhibición de vochos, una manifestación de algún sindicato charro, entre otras cosas. 

Curiosamente al ver esas cosas me transportaba a mi vida transcurrida antes de ser chofer, parecía que lo estaba viviendo otra vez porque siempre me encontraba fuera del carro cuando iniciaba mi recuerdo, curiosamente, en todos esos recuerdos, se oía la voz de mi jefe en el cuerpo de un hombre bien parecido, director de no sé que cosa, pero como no sé quien es, dudo que sea ese mismo hombre... Cuando mi jefe regresaba, cada vez, parecía caer desde una nube, en serio, me dolía el trasero al retornar de la visión. Otra vez mi jefe me decía "tal calle, número"... Lo mismo de siempre todos los días. Hasta que un día me atreví a jugar con su identidad... Me lo llevé a un callejón sin salida, saqué mi arma, troné la tela que dividía la cabina... No había nadie, solo un cadáver momificado de hacía 20 años de muerto, sangre seca en todos lados.... 

Canción del post
The Chaffeur - Duran Duran

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